Anécdotas de cómo hemos hecho sistemas y programas, sus errores y lecciones aprendidas. Opiniones. Algoritmos y Problemas. Sugerencias y Trucos.

Corrían los primeros años 70 del siglo pasado, y en nuestra minicomputadora compatible con la PDP-8 de la compañía Digital Equipment Corporation (DEC) casi no había forma de programar a no ser codificando a mano el lenguaje de máquina. Después el Instituto Central de Investigación Digital (ICID) desarrolló el ensamblador y posteriormente el lenguaje LEAL (de LEnguaje ALgorítmico) al que me he referido en otros artículos y en el que era bastante difícil y tedioso el programar al ser de notación posfix, sobre todo al evaluar fórmulas complicadas el que era mayormente nuestro caso.

En el país solamente existían algunas decenas minicomputadoras, y mayormente el LEAL era el lenguaje de desarrollo de preferencia. Mas tarde el ICID desarrolló el FORTRAN-IV el que si ya era un lenguaje poderoso para el desarrollo de nuestro tipo de programación para las Neurociencias.

Pero por el camino, un profesor universitario muy calificado, al que todos conocíamos por su apellido, Salcedo, logró instalar en la minicomputadora el FOCAL, de FOrmula CALculator, originalmente desarrollado por la DEC y que fue competidor del lenguaje BASIC al que todos conocemos sobre todo por el advenimiento posterior de las computadoras personales.

FOCAL al ser un intérprete era muy cómodo de usar en el teletipo de la CID-201-B, y permitía desarrollar programas interactivamente, probando partes y permitiendo el tener bibliotecas de subrutinas ya puestas a punto lo que aceleraba el proceso de terminación de los programas. Recordemos que para todo el resto de los lenguajes primero había que introducir la cinta de "la primera parte" que permitía entonces leer la cinta del programa como tal, y si compilaba bien luego había que introducir la cinta con "la segunda parte" o ejecutora del programa. Así era que se trabajaba con el LEAL, el FORTRAN, y otros que el ICID desarrolló.

Pero con el FOCAL se programaba como ahora en PYTHON, de manera interactiva, muy seductora para los programadores de la CID-201-B, y Salcedo se convirtió en el héroe nacional que promovió y demostró el uso de este sistema y lenguaje FOCAL a muchos desarrolladores. Por su empeño la utilización de la CID-201-B resultó en mayores y mejores resultados.

Nosotros en Neurociencias utilizamos el FOCAL para probar algoritmos por separado, pero al ser un intérprete y nuestros métodos ser de cálculo intensivo, al final siempre teníamos que desarrollar programas en lenguaje de máquina, en LEAL, o en FORTRAN a los que teníamos que agregar subrutinas escritas en lenguaje de máquina recurriendo a cuanto truco tuviésemos a la mano, o se nos ocurriesen, como por ejemplo utilizar aritmética logarítmica para el cálculo masivo de datos.

De todas formas, el FOCAL y Salcedo constituyeron un hito en el desarrollo de nuestra programación.

Muchas gracias por compartir, Salcedo.

Octavio Báez Hidalgo.